El Grupo de Investigación de Toxicología de Universidad de Sevilla, liderado por la Dra. Ana María Cameán, trabaja en la evaluación de la seguridad de compuestos azufrados como potenciales aditivos en nutrición animal.
Se trata de un proyecto de nutrición animal de I+D+i competitivo, concedido en la convocatoria 2018 de la Consejería de Transformación Económica, Industria, Conocimiento y Universidades de la Junta de Andalucía, actuando como IP2 la Dra. Silvia Pichardo, en colaboración con el tejido productivo, de la mano de la empresa de base tecnológica DOMCA con sede en Granada.
En este contexto, los derivados organosulfurados procedentes de plantas del género Allium han demostrado una gran actividad tecnologica y funcional y a pesar de ser presuntivamente seguros dado su tradicional uso en alimentación, es necesario realizar la evaluación de su seguridad para su uso en nutrición animal.
«Hasta el momento, hemos realizado el estudio toxicocinético de los organosulfurados y sus metabolitos, comenzando con el estudio de biotransformación in vitro que nos permiten dibujar una posible ruta metabólica en la que destacamos la oxidación y la conjugación con glutatión como principales vías de biotransformación. Los resultados se confirmarán realizando ensayos toxicocinéticos in vivo (OCDE 417)», ha explicado la investigadora Ana María Cameán.
Estos estudios se completan con ensayos toxicológicos in vivo siguiendo protocolos de experimentación internacionales (guidelines de la Organización para la Cooperación y Desarrollo Economico, OCDE).
Actualmente, se está realizando un estudio multigeneracional para evaluar la seguridad reproductiva, y los resultados indican ausencia de alteraciones en la 1ª generación de ratones CD1 expuestos vía oral a los compuestos de interés (OCDE 416). Toda la información generada hasta ahora apunta hacia un perfil toxicológico seguro para estas sustancias.